Niños sin cargas, espaldas sanas

Como Leonardo, la tortuga ninja, que tiene que llevar su pesado caparazón siempre a cuestas, armas, escudos y otros aditamentos como el uniforme resistente o los zapatos que aguanten todo, igualmente nuestros hijos se ven condenados a diario a portear todas sus herramientas de trabajo también, todos los libros y diccionarios, cuadernos y lapiceros, agenda escolar y bocadillo pueden abarrotar la mochila de cualquier estudiante.

Si el albañil tuviera que llevar los ladrillos de casa; el fontanero cargar herramientas y tuberías; los informes del funcionario siempre de un lado para otro o mangueras y hachas el bombero; material antidisturbios el policía o el juez con el mazo a cuestas todo el día, no sería entendible. Existen despachos, naves y locales donde los profesionales dejan sus aperos de labranza sin tener que cargarlos a diario arriba y abajo en la espalda o en moderno trolley.

Si nosotros no lo hacemos en nuestras profesiones ¿por qué los críos y no tan críos deben hacerlo? ¿No hay en el colegio un lugar donde dejarlo? Yo hace mucho que no voy a una escuela, pero veo en la tele y en las películas que los americanos siempre dejan sus libros y sus cosas en unas taquillas que hay a la entrada, que por cierto siempre se usa ese momento para ligar, entablar diálogos o iniciar peleas y retos para luego el recreo. Pero eso solo pasa en las películas, aquí si están esos buzones deben usarse para otras cosas que desconozco.

Vivimos un tiempo tecnológico donde predominan los ordenadores y smartphones, ipads y tabletas son la base del conocimiento hoy día, también las calculadoras por lo que no entiendo para qué tienen que aprender matemáticas. Ya, es un chiste fácil, no lo tengáis en cuenta. La cuestión es que en esta era de Internet que no ha hecho sino empezar en estos últimos años, los peques deberían formarse en ese mundo que les va a tocar vivir y son tímidas las variaciones que se producen en los métodos de estudio. Pizarras digitales, ordenadores y tabletas en clase, pero librotes, uno para cada materia, fichas para rellenar y deberes de todo para por las tardes. Ya me gustaría oíros a vosotros si el jefe os mandara trabajo para casa todos los días, pero las comparaciones no nos gustan.

La espalda de un niño está en formación y desarrollo hasta los 18 años como mínimo, en ese tiempo un peso inadecuado, unas posturas inadecuadas, pueden provocar deformaciones en la columna vertebral, pero también y estos sí que son muy frecuentes los dolores en las espaldas de adolescentes y preadolescentes. Y no, no es el colchón el culpable, no es que haga mucho el burro en el fútbol o el baloncesto, son los 200 kilos que pesa su mochila todos los días, más la bolsa de las extraescolares para la tarde, el balón, los patines, el bocata, y mil cosas más que para un niño o niña pueden ser importantes, sus tesoros.

No vale con que el peso no deba exceder el 10% del peso corporal o que la mochila deber ir adecuadamente colocada, tampoco el troley para el mayorcito que camina torcido por el peso con ruedas lateral. Mejor nada de peso.

Las llaves de la taquilla, un libro de lectura para el camino si hay ruta larga, (abstenerse betselers que pesan un quintal) un lápiz, una goma y una libreta para los deberes de la tarde. Nada más.

Las materias se pueden consultar por Internet. Los colegios tienen plataformas moodle infrautilizadas, las enciclopedias hoy día se actualizan a diario y los contenidos están a golpe de click, qué hacemos obligándoles a portear el conocimiento, tienen los profesores alguna evidencia de que la ciencia entra por ósmosis a través de la espalda o siguen pensando en los beneficios del peso de la cultura.

Es muy frecuente la queja de chicos y chicas en la consulta de pediatría por dolor de espalda, lo fácil es decir que llevan la mochila mal puesta, que si el carrito, que no se puede poner la mochila arriba porque se ríen de él y le llaman tortuga ninja, que si la llevan demasiado caída casi en el culo que mola más, que la llevan solo en un hombro que es lo más cool, y no, no es ese el problema, el problema es el absurdo de transportar las herramientas de trabajo cuando pueden quedar en la oficina y cuando hay alternativas.

El sistema educativo es el que hay, bueno o malo, pero tú maestro que me estas leyendo y que te has hecho eco del hagstag #sinmochilas puedes cambiar los dolores de espalda de tus alumnos. Ellos te lo agradecerán mucho, yo también.

Y no solo yo, otros amigos también te lo agradecerán:

• María José Mas – Neuronas en crecimiento La vuelta al cole mejor #sinmochilas
• Amalia Arce – Diario de una mamá pediatra La vuelta al cole… ¿con o #sinmochilas?
• Gloria Colli – Dra. Colli Pediatra Espaldas sin mochilas, niños felices.
• Mónica Lalanda – Medico a cuadros  Niños sin cargas, espaldas sanas.
• Javier Macías – en Twitter.
• Eugènia Miranda – Miranda Trauma Mochila escolar para mi hijo: No gracias.
• Rafa Pardo – Perdidos en Pandora Tribulaciones de una niña con mochila.
• Pepe Serrano – Pepepedia Si Ryanair las pesa, tú también puedes. Niños sin cargas espaldas sanas.
• Rafael Tímermans – Medicina y trabajadores ¿Pero en qué siglo estamos? Mejor #sinmochilas
• Blanca Usoz – Medicina participativa Mochilas y dolor